Morelia, Michoacán, a 21 de julio de 2025. La dirigencia nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI) lanzó una severa crítica contra el gobierno federal por los alarmantes niveles de violencia en Sinaloa. Alejandro Moreno, presidente del Comité Ejecutivo Nacional del tricolor, advirtió que la estrategia de seguridad no está dando resultados y que la situación es “inaceptable”.
Aumentan homicidios un 266% en Sinaloa
De acuerdo con cifras compartidas por el propio dirigente priista, en los primeros seis meses del año han sido asesinadas 893 personas en Sinaloa. Solo en junio se registraron 207 homicidios, lo que representa un incremento del 266% en comparación con el mismo mes del año anterior.
‘No hay control ni voluntad para enfrentar al crimen’
En un mensaje difundido en sus redes sociales, Alejandro Moreno aseveró que los datos contradicen al discurso oficial que sostiene que la estrategia de seguridad en la entidad funciona. “Eso no sólo es mentira; es una falta de respeto al dolor de las familias mexicanas”, afirmó Alejandro Moreno.
El líder priista señaló que la violencia continúa desbordada, que la extorsión está en aumento y que el gobierno federal se enfoca más en justificar su actuación que en ofrecer resultados concretos.
Reclaman seguridad real y no discursos
Moreno subrayó que la ciudadanía no busca justificaciones ni cifras maquilladas, sino acciones contundentes para vivir en paz. “Quiere seguridad real. Quiere un gobierno que dé la cara, que tenga carácter y que no le tiemble la mano”, expresó el también senador.
Señalamientos en medio de clima de violencia
Las declaraciones del dirigente del PRI se dan en un contexto de alta tensión en la entidad, donde los homicidios dolosos, extorsiones y otros delitos han impactado a la población civil. El llamado del partido busca presionar al gobierno para replantear su estrategia en materia de seguridad pública.
Demanda política por resultados, no excusas
Alejandro Moreno concluyó que el actual modelo de seguridad ha fracasado y que es momento de asumir responsabilidades. Enfatizó que se necesita un cambio de rumbo inmediato y una política que no esté basada en discursos, sino en acciones efectivas.