Morelia, Michoacán a 9 de abril de 2025.- El obispo más longevo del mundo es Monseñor José de Jesús Sahagún de la Parra, quien con 103 años de edad sigue celebrando misa a diario. Originario de Cotija, Michoacán, su trayectoria ha sido reconocida a nivel mundial por su vitalidad espiritual y pastoral.
Monseñor Sahagún nació el 1 de enero de 1922 en Cotija, un municipio que ha dado figuras prominentes a la Iglesia Católica, como el mismo sacerdote polémico Marcial Maciel, fundador de Los Legionarios de Cristo. Fue ordenado sacerdote en 1944 y consagrado obispo en 1961 por el Papa Juan XXIII. Desde entonces, ha sido un referente en el trabajo pastoral de México. Su vocación ha sido constante a lo largo de más de ocho décadas de ministerio.

Misa diaria a los 103 años
A pesar de su avanzada edad, Monseñor Sahagún celebra misa todos los días en su casa, donde vive acompañado de una comunidad religiosa que le asiste. Según reportó Aci Prensa, su misa diaria es un momento profundamente espiritual, en el que ora no sólo por la Iglesia, sino por México entero. “El obispo más anciano del mundo continúa firme en su fe y entrega a Dios”, destaca el medio.
Reconocimiento mundial por su testimonio
La agencia de noticias ACI Prensa señaló que Sahagún de la Parra es reconocido como el obispo vivo más longevo del planeta, superando incluso a obispos eméritos de otros continentes. Su historia ha sido compartida en medios internacionales católicos y se considera una inspiración para nuevas generaciones de religiosos.
El municipio michoacano de Cotija es ya conocido por ser la cuna de San Rafael Guízar y Valencia, el primer obispo mexicano canonizado, así como del polémico Marcial Maciel, fundador de los Legionarios de Cristo. Con la figura de Monseñor Sahagún, Cotija reafirma su relevancia histórica como semillero de vocaciones religiosas que han impactado tanto a México como a la Iglesia Universal.
