Morelia, Michoacán, a 28 de febrero de 2025.- El Gobierno de México entregó a Estados al histórico narcotraficante Rafael Caro Quintero como parte de una lista de 29 criminales que purgaban sentencia en México.
La entrega ante autoridades del país del norte se ve como un hecho sin precedentes y como una muestra de cooperación del Gobierno mexicano en la relación con Estados Unidos en momento en que el presidente Donald Trump ha lanzado fuertes críticas contra los cárteles y su operación en México.
Elementos de la DEA se tomaron una foto tras la llegada del histórico líder del Cártel de Guadalajara a aquel país, ya que se tenía esa entrega pendiente desde hace muchos años. A Caro Quintero se le atribuye la muerte del agente de la DEA Enrique “Kiki” Camarena en 1985.

La deuda de Caro
Desde ese entonces, el capo mexicano tiene una deuda pendiente con la entidad antidrogas, pues Camarena es el único agente de la organización que ha muerto a mano de narcotraficantes. A Enrique Camarena se le atribuye la localización del Rancho El Búfalo, donde se incautaron más de mil hectáreas sembradas de mariguana cuidadas por casi 10 mil campesinos.
El decomiso se consideró invaluable para la época y se calculó que se trataba del suministro de varios meses de droga en las calles de Estados Unidos.
Camarena fue secuestrado en Guadalajara, Jalisco, el 7 de febrero de 1985, presuntamente por órdenes de Rafael Caro Quintero y otros miembros del Cártel de Guadalajara. Durante su cautiverio, fue brutalmente torturado antes de ser asesinado. Su cuerpo, junto con el de su piloto Alfredo Zavala, fue enterrado en los límites entre Michoacán y Jalisco, y hallado semanas después, lo que desató una gran presión desde entonces de Estados Unidos sobre México para capturar a los responsables.

Este asesinato marcó un punto de quiebre en la lucha contra el narcotráfico y llevó a la desarticulación del Cártel de Guadalajara, además de deteriorar las relaciones entre México y Estados Unidos en materia de cooperación antidrogas.
A Rafael Caro Quintero se le considera un cabecilla histórico porque fundó, junto con Ernesto Fonseca “Don Neto” y Miguel Ángel Féliz Gallardo, la organización del Cártel de Guadalajara, en el que en épocas tempranas colaboró Joaquín “El Chapo” Guzmán.
A este cártel se le considera el fundador del narcotráfico moderno, que dio a conocer la gran vida de los jefes delincuenciales, su gran poder económico y de influencia política y en otros ámbitos.
De esta organización, devino lo que ahora es el Cártel de Sinaloa, cuyos liderazgos se entrenaron en la escuela del Cártel de Guadalajara.
En la lista de 29 delincuentes entregados a Estados Unidos también se encuentra Vicente Carrillo Fuentes, “El Viceroy”, quien fuera líder del Cártel de Juárez; Miguel Ángel Treviño Morales, apodado “El Z-40” y Oscar Omar Treviño Morales, “El Z-42”, ambos considerados como los principales líderes de de Los Zetas; Erick Valencia Salazar, “El 85”, quien encabezaba la organización conocida como “Los Matazetas”; y un cabecilla de la organización de La Familia Michoacana, Jesús “El Chango” Méndez Vargas, entre otros.