Morelia, Michoacán a 8 de abril de 2025.- El fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, reconoció públicamente que el Rancho Izaguirre, ubicado en el municipio de Teuchitlán, Jalisco, era utilizado por grupos delictivos como un centro de operaciones.
“Ya logramos establecer con toda precisión que el predio en Teuchitlán, Jalisco, era un centro de reclutamiento, operaciones y capacitación del crimen organizado”, aseveró Gertz Manero en la conferencia matutina en Palacio Nacional.
Un predio clave para el crimen organizado en Jalisco
Con esta declaración, la Fiscalía General de la República (FGR) confirma que el lugar no sólo fue escenario de hechos violentos, sino también pieza clave en las estructuras logísticas del crimen organizado en el Occidente del país.
La información proporciona nuevas líneas de investigación sobre la forma en que las organizaciones criminales reclutan, capacitan y operan desde predios rurales en estados con alta incidencia de violencia como Jalisco.
¿Qué se sabía del Rancho Izaguirre?
El Rancho Izaguirre ha sido señalado previamente por colectivos de búsqueda y medios independientes como un lugar relacionado con desapariciones forzadas y hallazgos de restos humanos en supuestas fosas clandestinas.
Reportes recientes indicaron la presencia de cuerpos calcinados en la zona, así como evidencia de actividades sistemáticas de ocultamiento de crímenes. Sin embargo, hasta ahora no existía una confirmación oficial sobre su uso como base operativa del crimen.
¿Hacia dónde va ahora la investigación?
La declaración de Alejandro Gertz Manero marca un giro en el tratamiento del Caso Teuchitlán, ya que admite de manera oficial la existencia de centros de adiestramiento criminal en territorio nacional.
Esta información podría fortalecer acciones legales contra operadores logísticos de los cárteles y abrir nuevas rutas para esclarecer cientos de desapariciones de personas en esta zona.
Organizaciones civiles y colectivos de familiares han exigido desde hace años que se reconozca el papel estratégico de ciertos predios rurales utilizados por grupos criminales, señalando la falta de acción estatal frente a estos centros de operación.
La confirmación de la FGR se da en medio de una creciente presión social y mediática para que las autoridades profundicen sus investigaciones sobre el funcionamiento interno del crimen organizado en regiones como Jalisco.