Morelia, Michoacán, a 16 de julio de 2025. — Una declaración reciente de Donald Trump sobre Jeffrey Epstein ha reavivado la controversia entre sus propios seguidores, particularmente aquellos que han promovido teorías conspirativas sobre la muerte del magnate y su presunto “client list”.
Trump intenta cerrar el tema Epstein, pero genera el efecto contrario
En una publicación realizada el sábado en Truth Social, el expresidente de Estados Unidos imploró a sus seguidores no perder tiempo hablando de Epstein: “Vamos a mantener a nuestro país como el más candente del mundo y no desperdiciar tiempo ni energía en Jeffrey Epstein, alguien que a nadie le importa”.
Sin embargo, la publicación tuvo el efecto opuesto. Los datos de Google revelaron un aumento repentino en las búsquedas relacionadas con Epstein tras el mensaje de Trump. En Truth Social, su posteo superó las 45 mil respuestas, muchas de ellas críticas.
El mensaje divide a su base más leal
Comentarios en su publicación mostraron una ruptura con algunos de sus seguidores más fieles. “Esta declaración me rompe el corazón, señor Presidente”, escribió un usuario. Otro expresó: “¡Queremos que se expongan a los pedófilos de la élite!”.
El enojo también se trasladó fuera del entorno digital, incluyendo eventos como el Student Action Summit de Turning Point USA, donde se cuestionó abiertamente la postura de Trump sobre Epstein.
Las teorías conspirativas regresan con fuerza
Desde la muerte de Epstein en 2019, oficialmente clasificada como suicidio, las teorías conspirativas sobre su fallecimiento y sobre una supuesta lista de clientes poderosos han persistido en múltiples sectores. La frase “Epstein no se suicidó” se volvió parte del discurso cultural en redes, decoraciones e incluso memes.
Trump, quien históricamente ha utilizado teorías conspirativas para reforzar su discurso político —como cuando cuestionó el acta de nacimiento de Barack Obama—, ahora enfrenta el escepticismo de quienes alguna vez respaldaron ese tipo de narrativas.
Una contradicción que alimenta la sospecha
Durante su campaña más reciente, Trump aseguró que “no tendría problema” en investigar la supuesta lista de clientes de Epstein. Incluso nombró a funcionarios como Kash Patel y Dan Bongino, conocidos por respaldar teorías de corrupción y abuso. Sin embargo, ahora que el Departamento de Justicia —bajo su propia administración— concluye que no existe tal lista incriminatoria, el mensaje es: no hay nada que ver aquí.
“Nadie explotó más esas dudas que Donald Trump”, afirmó el académico Russell Muirhead de Dartmouth College, quien ha estudiado el vínculo entre política y conspiraciones. “Ahora esos funcionarios son su gente, y él dice que no hay nada que ver. La contradicción es evidente”.
El informe del Departamento de Justicia y la reacción viral
La controversia se reactivó a raíz de un reporte revelado por Axios, que cita un memorando del Departamento de Justicia concluyendo que no existen pruebas para procesar a otras personas relacionadas con Epstein y que su muerte fue un suicidio. Esta afirmación fue tomada por muchos seguidores de Trump como una traición.
Las críticas aumentaron incluso desde sectores que lo han apoyado, como la exfiscal general Pam Bondi, y se reflejan en redes como Reddit, YouTube, X (antes Twitter) y la misma Truth Social.
Trump enfrenta ahora el fuego de su propio discurso
Joseph Uscinski, experto en teorías conspirativas, subrayó que ideas sobre élites abusadoras han existido desde hace siglos, pero el caso Epstein logró catalizar estas sospechas en una narrativa moderna y viral.
“La audiencia lo escuchaba porque les decía lo que ya creían”, explicó Uscinski. “Ahora que les dice algo diferente, no quieren aceptarlo”.