Morelia, Michoacán, a 6 de mayo de 2025. — El primer ministro de Canadá, Mark Carney, dejó en claro durante su primer encuentro oficial con el expresidente Donald Trump que su país no está ni estará jamás a la venta, en respuesta a las insinuaciones persistentes del mandatario estadounidense sobre la posibilidad de convertir a Canadá en el “estado 51”.
Carney traza límites: ‘Nunca estará en venta’
En una conversación distendida pero firme en la Oficina Oval, Carney comparó a Canadá con propiedades emblemáticas como el Palacio de Buckingham: valiosas, históricas e intransferibles. “He sido claro a nombre de los canadienses: esto nunca va a pasar. Canadá no está en venta. Nunca lo estará”, afirmó posteriormente en una conferencia desde la embajada canadiense en Washington.
Trump insiste, pero Carney no cede
Durante el encuentro, Trump no ocultó su deseo de anexar Canadá como un estado más de la Unión Americana. Aunque el expresidente intentó minimizar el asunto con frases como “nunca digas nunca”, Carney aseguró haberle pedido directamente que dejara de repetir ese tipo de comentarios. “Siempre he distinguido entre deseos y realidad”, comentó con ironía.
Un tono cordial pero con tensión de fondo
A diferencia de la ríspida relación que Donald Trump sostuvo con el ex primer ministro Justin Trudeau, la conversación con Carney estuvo marcada por elogios mutuos. Trump habló de “respeto” y “amistad”, mientras que Carney reconoció la “hospitalidad” del expresidente. Sin embargo, esa cordialidad no fue suficiente para resolver las diferencias comerciales.
Tarifas: el tema sin resolver
Donald Trump fue tajante al reiterar que no tiene intenciones de eliminar las tarifas impuestas a productos canadienses. “Eso es simplemente así”, expresó. Carney, por su parte, señaló que la reunión fue “muy constructiva”, aunque enfatizó que cualquier acuerdo comercial deberá ser benéfico para Canadá en el corto, mediano y largo plazo.
Reacción canadiense y contexto político
La posición firme de Carney coincide con el sentimiento generalizado en Canadá tras la imposición de tarifas por parte de Trump, un hecho que alimentó la ola de descontento que lo catapultó a la victoria electoral. En su discurso de triunfo, el líder liberal advirtió que los intentos del expresidente estadounidense por “quebrantar” a Canadá no eran meras amenazas vacías.
Trump en redes: amistad, pero sin dependencia
Previo a la reunión, Trump publicó en Truth Social que Estados Unidos no necesita “nada” de Canadá, salvo su amistad. “No necesitamos sus autos, no necesitamos su energía, no necesitamos su madera”, escribió, insistiendo en que Canadá, en cambio, sí depende de Estados Unidos.
¿Nueva era en la relación bilateral?
El encuentro entre ambos líderes abre una nueva etapa en las relaciones entre dos naciones históricamente aliadas. Aunque la cordialidad fue evidente, la firmeza de Carney y la postura inflexible de Trump en materia económica sugieren que aún quedan múltiples desafíos por resolver.
Metadescripción: Durante su primera reunión oficial, el primer ministro canadiense Mark Carney dejó en claro a Donald Trump que Canadá no está en venta, a pesar de los comentarios del expresidente estadounidense.
Etiquetas: