Morelia, Michoacán, a 19 de agosto de 2025. La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) despidió la etapa que surgió con la reforma de 1994, en una sesión encabezada por la ministra presidenta Norma Piña, quien afirmó que será la sociedad y la historia las que “juzgarán a quienes hemos juzgado”.
Un ciclo de casi tres décadas
La Reforma Judicial de 1994 dio origen a una nueva etapa en la SCJN, fortaleciendo al máximo tribunal como garante de la justicia constitucional. En su discurso, Norma Piña subrayó que “la Corte ha recorrido un largo camino para construir su legitimidad” y que el verdadero balance quedará en manos de la sociedad.
Legado en defensa de los derechos humanos
La ministra presidenta resaltó que los precedentes y resoluciones emitidos a lo largo de los años han conformado “un sólido bloque protector de los derechos fundamentales”, además de garantizar la progresividad de los derechos humanos en el país.
Asimismo, definió a la SCJN como “la piedra angular de la justicia constitucional, el máximo garante del ordenamiento jurídico nacional y un bastión en la defensa de la democracia constitucional y las libertades de todas las personas”.
Reconocimiento al personal de la Corte
En su mensaje, Piña dedicó un espacio especial a agradecer al personal jurisdiccional, administrativo y operativo de la institución. Reconoció su esfuerzo cotidiano, muchas veces invisible para la ciudadanía, pero indispensable para garantizar el acceso a la justicia.
“Quiero rendir un homenaje a quienes día tras día, en silencio y sin reflectores, han sostenido la labor de este tribunal”, aseveró. También subrayó que su constancia y profesionalismo han permitido que la maquinaria de la justicia nunca se detenga.
Horizonte de dignidad y libertad
La ministra presidenta concluyó que mientras existan ciudadanos dispuestos a defender la justicia con integridad, México contará con un horizonte basado en la dignidad y la libertad. Con ello, dio por cerrada la etapa histórica de la Corte iniciada hace tres décadas.